Vértigo, emoción y una pizca de incredulidad son algunos de los sentimientos que experimento estos días. Tras dos años de arduo trabajo, por fin, mi primera novela sale a la venta. Me parece alucinante que yo haya superado esta prueba de paciencia y constancia que ha sido el proceso de escritura y reescritura. Para qué negarlo, me gusta el formato corto del cuento por su rapidez, concisión e inmediatez. Pero esta vez tocaba jugar con los atrevidos.

El título tiene que ver con eso, con las pruebas que afrontamos cada día y las elecciones que hacemos. Ojalá la disfrutéis porque a partir de hoy es más vuestra que mía.

Espero con ansias vuestras opiniones. Y por favor, si os gusta, regaladla y hablad de ella. De vosotros depende que nuevos lectores lleguen a sus páginas.

Millones de gracias por estar ahí.